El concepto "sostenibilidad emocional", incorporado por la psicóloga clínica Inma Puig, nos invita a reflexionar sobre la comprensión de las emociones, tanto propias como externas, para transformar y mejorar nuestras relaciones y garantizar una respuesta positiva y constructiva ante situaciones difíciles.

De igual forma que hemos de intentar cuidar nuestro entorno, tener presente nuestro cuidado físico y emocional nos permite desarrollar nuestro autoconocimiento o resiliencia. Este concepto es indispensable no solo en nuestra vida personal, sino que resulta altamente eficiente dentro del entorno laboral.

En relación, existen algunos recursos útiles que podemos incorporar:

Autocuidado. Dedicar tiempo a tu salud emocional es clave para sentirte bien. Practicar ejercicio, incluir técnicas de relajación o meditación, pasar tiempo al aire libre o dedicar tiempo a tus hobbies, puede ayudarte a recargar tu energía y potenciar tu motivación.

Ser agradecido/a. Cultivar este concepto mejora tu bienestar emocional. Reflexionar cada día sobre aquello por lo que puedes dar gracias te ayuda a enfocarte en lo positivo y apreciar lo bueno que forma parte de tu vida para alejar el estrés o la ansiedad.

Reconexión. Las relaciones tienen un impacto positivo en la salud emocional. Conectar con tu yo interior para reconocer tus metas y objetivos puede ayudarte a reforzar tu confianza o autoestima. De igual forma, prestar atención a tu comunicación y relaciones interpersonales puede devolverte el apoyo y los vínculos que te proporcionan apoyo y te den fuerza en tu vida.

Incorporar e interiorizar este tipo de conceptos puede aportarte muchos beneficios, tanto a nivel personal como profesional:

Desarrollo de habilidades

Mejorar tu salud mental con la sostenibilidad emocional puede contribuir en el aumento de tu autoestima y la ganancia de una mayor resiliencia. Estos elementos te permiten mejorar tus habilidades para afrontar de forma más eficiente los problemas y conflictos que se presenten. De igual forma, la confianza de disponer de un mayor control de tus emociones te ayuda a valorarte y motivarte para potenciar tu crecimiento personal y profesional.

Mejora del rendimiento

Disponer de nuevas capacidades, te da opción a incrementar tu adaptación al entorno social y laboral. La mejora de tus relaciones con el equipo, por ejemplo, pueden incrementar la productividad y darte recursos que mejoren tu desempeño.

Compromiso

La motivación que te devuelve el control y la gestión de tu valía y habilidades te aporta mayor interés por aprender y mejorar. Esto se puede traducir en un mayor compromiso con tu trabajo y tu organización, fomentando el sentimiento de pertenencia a la empresa y promoviendo un entorno comunicativo y colaborativo.

La sostenibilidad emocional se convierte así en un concepto realmente útil para cualquier persona. Tanto a nivel individual como grupal, el bienestar resulta clave para ganar estabilidad, reducir el estrés o la ansiedad, mejorar las relaciones interpersonales y ganar interés e ilusión.

En resumen, aunque practicarla requiere dedicación, el tiempo invertido en sostenibilidad emocional resulta del todo bien empleado cuando la persona observa los grandes y óptimos resultados que puede adquirir.

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Autora: Érika Pérez

Imagen: www.freepik.es

Sostenibilidad emocional: la importancia de cuidar tu equilibrio y bienestar interior