La inteligencia artificial, por ejemplo, es uno de los elementos más populares que cada vez toma más protagonismo, no solo en el ámbito laboral, sino en cualquier escenario. La automatización de las funciones, el empleo del Big Data o la inclusión del ChatGPT, hacen que cada vez más personas incorporen estos medios en su día a día.

¿Cómo afecta el sedentarismo cognitivo?

En el terreno laboral, el reconocimiento de las habilidades para identificar perfiles con talento y altas competencias, continúa siendo un reclamo para muchas empresas. En este punto, entra en juego una cuestión que pone en contraposición el uso de estos nuevos recursos y nos invita a reflexionar sobre si su integración está mermando o sacrificando algunas de las capacidades básicas y necesarias para cualquier trabajador/a. Las habilidades creativas, el pensamiento crítico o el autoaprendizaje podrían considerarse elementos que pueden llegar a verse comprometidos con un uso excesivo y dependiente de la inteligencia artificial.

En este sentido, el concepto de sedentarismo cognitivo nos acerca hacia una falta de actividad mental derivada de la pluralidad e inmediatez de respuestas que ofrece la IA. Este nuevo recurso está transformando muchas de las tareas que anteriormente requerían de un mayor esfuerzo. Esta reducción de actividad mental puede considerarse susceptible de fomentar consecuencias que afecten a nuestra capacidad de pensamiento.

¿Podemos prevenir o reducir el sedentarismo cognitivo?

Para evitar este deterioro, la educación en el uso de la IA puede representar una solución que ayude a promover un mejor manejo de estas herramientas. Dentro del entorno laboral, fomentar un empleo responsable puede ser determinante para mantener activa la motivación por el desarrollo de habilidades. De igual forma, a título personal, tenemos la responsabilidad de examinar la utilización de estos recursos para encontrar el equilibrio entre comodidad y necesidad.

¿Responde su uso habitual a una necesidad de mejora o eficiencia o simplemente se busca la comodidad de obviar el pensar por nosotros/as mismos/as?

Estimular nuestra mente no es solo un elemento necesario en el ámbito laboral o académico. Incorporar actividades que ayuden a fomentar la creatividad, activen el aprendizaje o generen retos, puede ayudar en el desarrollo de habilidades que contribuyan en la resolución de conflictos, y por lo tanto, ayuden en el día a día a evitar o reducir situaciones de estrés o ansiedad, por ejemplo.

En resumen, la tecnología nos brinda la oportunidad de mejorar nuestra calidad de vida. Como cualquier elemento o situación, viene acompañada de diversas ventajas o desventajas. La concienciación y estudio de cada una de estas ventajas puede aportarnos grandes beneficios en nuestro empleo o tareas cuotidianas. Pero además, estudiar sus desventajas también puede enseñarnos nuevas perspectivas de las que aprender a crecer como personas y como sociedad.

El impacto de las nuevas tecnologías depende básicamente de nosotros/as. Quizás simplemente sea cuestión de usar la IA con inteligencia.

Y tú, ¿Qué opinas? Te invitamos a compartir tu punto de vista en los comentarios.

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Autora: Érika Pérez

Imagen: www.freepik.es

Inteligencia artificial vs sedentarismo cognitivo